CUANDO SE CUMPLEN LOS SUEÑOS...

Esta es la primera levantá y la primera chicotá que doy con la Virgen de Regla. Cuatro largos años intentando ser su costalero y por fin este año Ella quiso. A pesar de la lluvia que interrumpió mi primera salida bajo los palos de este imponente paso de palio, Ella quiso que disfrutara un ratito con Ella de algo que llevaba mucho esperando y que cuando por fin me vi debajo, en esta primera levantá, dos lágrimas de felicidad se derramaron por mis mejillas.

Aunque al final dichas lágrimas se tornaran amargas por  tener que volver antes a casa, nadie me podrá quitar jamás esa sensación de paz, serenidad, calma y felicidad que Ella supo trasmitirme en el momento que por primera vez en mi vida, la llevaba sobre mí...

Gracias Madre mía de Regla por permitirme ser tu costalero, ojalá y pueda serlo por mucho años.